Desde el diseño hasta el final de su vida útil, garantizando un alto rendimiento, reciclabilidad y un impacto medioambiental mínimo.
Las ventanas y puertas no están hechas solo de aluminio. Para ser coherentes, hemos seleccionado proveedores que comparten nuestros valores.
Reducir la huella de carbono de los edificios empieza por su diseño y por sus materiales. Dado que un tercio de las emisiones totales de CO₂ se producen durante la fase de uso, la forma más eficaz de reducir las emisiones operativas es ofrecer soluciones de fachada de alto rendimiento que optimicen el uso de la energía a lo largo del tiempo. Por eso diseñamos fachadas que ofrecen un aislamiento térmico excepcional, eficiencia energética, confort acústico y un mantenimiento mínimo. Pero esto no es todo: nuestros nuevos sistemas están fabricados con al menos un 75% de material reciclado y un 95% de contenido reciclable, y están diseñados para ser circulares: fáciles de desmontar, de reutilizar y de reciclar al final de su vida útil. Para ir aún más lejos, nos aseguramos de que nuestros sistemas se produzcan dentro de una cadena de suministro responsable y certificada por organizaciones externas, lo que proporciona la máxima transparencia y responsabilidad. Al combinar el rendimiento durante el uso con materiales circulares de bajo impacto, nuestras fachadas logran una huella de carbono hasta un 70% menor que la de sistemas similares.
Sostenibilidad - firmada y sellada: nuestros perfiles de aluminio cumplen de forma exhaustiva los exigentes criterios de todos los certificados de construcción mencionados y, por tanto, han contribuido sustancialmente a la certificación de los edificios aquí indicados.
Nuestra oferta principal de ventanas, puertas y fachadas, renovada desde 2023, no solo es sostenible, sino que también ofrece a los usuarios de los edificios un entorno cómodo, seguro y protegido... por mucho tiempo.
En la actualidad, la sostenibilidad de un edificio es un criterio de evaluación para compradores, inquilinos e inversores. Así se refleja en el creciente número de certificaciones para edificios, que evalúan la sostenibilidad según criterios definidos. Certificados C2C, informes de pruebas de rendimiento, EPD dinámicas... podemos demostrar que nuestros productos cumplen con las más altas expectativas del mercado.
75 / 95 significa ir un paso más allá. El uso de un 75 % de contenido reciclado y un 95 % reciclable maximiza nuestras oportunidades y nos permite minimizar la huella de carbono de nuestros nuevos productos.
Estamos comprometidos con un uso sostenible y circular de los recursos, reciclando productos al final de su vida útil: nuestro aluminio Hydro CIRCAL®, fabricado con un mínimo del 75 % de chatarra posconsumo reciclada.
Gracias a alianzas estratégicas, podemos utilizar juntas EPDM con hasta un 50 % y barras aislantes de poliamida con hasta un 100 % de material posconsumo reciclado. Nuestra ambición es avanzar del 75/95 al 80/100: 80 % de contenido reciclado y 100 % reciclable.
Nuestro conjunto de herramientas digitales garantiza la trazabilidad completa de nuestros productos, desde la producción hasta el final de su vida útil. A cada producto se le asigna un ID digital, creando un gemelo digital que hace un seguimiento de su ciclo de vida completo, facilita el mantenimiento, permite cálculos precisos de la huella de CO₂ y la estimación del valor al final de la vida útil. Con los certificados de circularidad, cuantificamos el contenido de aluminio reciclado empleado en cada proyecto, mientras que los documentos contables validan la recuperación de la chatarra al final de su vida útil ante las autoridades. Estas herramientas proporcionan a nuestros clientes la transparencia necesaria para optimizar la huella de CO2.
Si estás convencido, ¡contáctanos y te asesoraremos con tu proyecto!