El estudio de arquitectura Labics ha sido el encargado de diseñar este original espacio educativo, en un antiguo garaje ubicado en el centro de Milán (Italia), formado por un jardín de infancia y una escuela de educación infantil. También alberga un polideportivo con tres piscinas, proyectado sobre una estructura preexistente de hormigón armado. Ideado en colaboración con Reggio Children, el nuevo centro está sustentado en un ágora donde niños y educadores pueden reunirse, conocerse y aprender día a día.
Para nosotros es necesario poder concebir ambientes capaces de estimular una interpretación activa del espacio. en otras palabras, necesitamos imaginar lugares donde podemos experimentar, lugares donde podemos crecer, lugares lo más abiertos posible a diferentes usos e interpretaciones.
LABICS
Una de las principales premisas del proyecto, ha sido la recuperación de los espacios abovedados preexistentes para dotarlos de un nuevo uso, eminentemente didáctico. Así la reinterpretación de los espacios junto con la adjudicación de nuevos programas de uso, ha dado lugar a un enclave único, donde también se ha incorporado una original zona dedicada al deporte, en lo que era el antiguo sótano, donde se ubicaba la antigua tienda de recambios de coches.
El gran ágora, protagonista del proyecto y punto de encuentro
Caracterizado por la coexistencia de espacios públicos, semipúblicos y privados, dispuestos en continuidad entre sí, el centro infantil, para alumnos de entre 6 meses y 6 años, incorpora la estructura de una ciudad cuyos habitantes ‐niños y educadores‐ se encuentran y comparten espacios. Las distintas secciones didácticas convergen en el ágora, muy luminosa y transparente, que es el verdadero corazón del proyecto. Un volumen de doble altura, centro de organización espacial y distribución de caminos horizontales y verticales que se extienden sobre 2.100 metros cuadrados. Al mismo tiempo hace las funciones de atrio, un lugar de reunión informal y de socialización, donde se desarrolla el día a día de los niños. Desde el ágora también se establece la conexión visual con las aulas, los laboratorios y los ambientes didácticos, a través superficies acristaladas alargadas que dejan pasar la mirada y la luz. Todas las aulas están equipadas con grandes espacios abiertos donde los niños pueden jugar y continuar la experiencia educativa al aire libre, en contacto con la naturaleza. Las tres piscinas ubicadas en el sótano, de aspecto industrial, pero a su vez muy luminoso, son accesibles al público a través de una entrada independiente.
Sistemas de aluminio WICONA, certificados Cradle to Cradle Silver, para garantizar un elevado confort interior
Todas las conexiones dentro‐fuera se establecen a través del sistema de muro cortina WICTEC 50 en su versión industrial, ideal para un edificio de estas características, donde además se requerían grandes espacios acristalados para gozar de la máxima entrada de luz natural. WICTEC 50 es una sofisticada fachada de montantes y travesaños que ofrece una amplia gama de variantes con la finalidad de adaptarse a todo tipo de exigencias constructivas. Gracias a su mínimo perfil visto, de tan sólo 50 mm, y a la profundidad de sus perfiles, que oscilan entre los 50 y los 260 mm, el sistema permite crear fachadas con estéticas especiales y a medida del proyecto. También se han empleado puertas de acceso WICSTYLE 75 evo de WICONA, que se integran perfectamente en la fachada, y ofrecen la posibilidad de incorporar Rotura del puente térmico además de disponer de opción de marco para personas con movilidad reducida; y ventanas WICLINE 75 evo, que proporcionan al conjunto del edificio un alto aislamiento tanto térmico como acústico.
Un verdadero sistema urbano
En conexión directa con las aulas de la primera planta, existe una zona de terrazas de 600 metros cuadrados que se emplea como zona de recreo y está equipada con muebles móviles, plantas y pequeños jardines educativos. Además de estos espacios, a lo largo del camino que une la guardería con el polideportivo, se encuentra también un pequeño teatro al aire libre y un espacio cubierto diseñado para acomodar mesas y sillas. Dos grandes agujeros circulares conectan este espacio con la terraza del jardín de infacia, donde la presencia de dos árboles recuerda el nombre del complejo: “Jacaranda”, un árbol tropical que crece en Argentina, el país de origen de la familia que concibió todo el proyecto.
Proyecto: Escuela infantil Jacaranda
Ubicación: Milan, Italy
Estudio de arquitectura: Study Labics (Maria Claudia Clemente, Francesco Isidori)
Consultores de fachadas: Studio Speri | MEP: ing. Gragnaniello
Fachadista: Stilser
Soluciones WICONA utilizadas: WICTEC 50 IND ‐ WICLINE/WICSTYLE 75 EVO
Fotografía: Marco Cappelletti/Delfino Sisto Legnani
